Se define por las operaciones mentales que se activan en los estudiantes al realizar una determinada tarea. A mayor número de operaciones mentales requeridas para ser resuelta la tarea, mayor es la demanda cognitiva de la misma.
La demanda cognitiva de las tareas aumenta de un nivel a otro. Es importante no confundir complejidad con dificultad de las tareas. En un mismo nivel es posible encontrar tareas fáciles y difíciles pues la demanda cognoscitiva y el nivel de dificultad de una tarea no tienen un correlato necesario
Tareas de baja demanda cognitiva
Ordena alfabéticamente una lista de palabras determinadas.
Llena los espacios en blanco con pronombres personales.
Resuelve ejercicios de adición.
Completa una sucesión de números.
Tareas de alta demanda cognitiva
Encuentra ideas importantes de un texto y elabora un resumen.
Identificar el punto de vista del autor del texto a partir de la comprensión de la lectura señalada e indica cómo se siente el personaje principal al realizar esa acción.
Resuelve problemas. Responde preguntas a partir de un gráfico estadístico.
Responde. Imagina que ya eres grande, ¿En qué te gustaría trabajar? ¿Por qué?
Emite un juicio a partir de la resolución de un problema
La producción o creación de estructuras textuales es un ejemplo de estos productos escritos: inventa un acróstico con una palabra determinada, crea de una poesía.
Crea problemas.
Crea un juego matemático.
Elabora una caja.