Las bases de todo el Perú han decidido realizar un Paro Nacional Preventivo el 23 de mayo, con la finalidad de que el gobierno dé solución a nuestras justas demandas. Hemos informado al ministro de Educación, Morgan Quero, que de lo contrario, el magisterio acatará una Huelga Nacional Indefinida.
No debemos bajar la guardia. Tenemos que estar más unidos que nunca, informando a las bases sobre nuestra plataforma de lucha y los motivos que nos llevan a exigir su cumplimiento.
Por ejemplo, exigimos que se destine el 6% del PBI para Educación y que se lleve a cabo un plan de remediación de la infraestructura escolar, así como un programa alimentario para combatir la anemia y la desnutrición que sufren nuestros estudiantes.
Exigimos que se reglamente la Ley N° 31431, para que haya un psicólogo, un odontólogo y un enfermero en cada colegio. También, la reglamentación de la Ley N° 31495, para que se pague la deuda social sin judicializar, la reglamentación de la Ley 31923 para que los auxiliares de educación ganen el 85% de 1 RIM de primera escala magisterial y el respeto a derechos laborales como el pago de escolaridad a 75 mil maestros recién nombrados.
Por desgracia en este país para que se cumpla la ley hay que hacer paros y huelgas.
Por otro lado, exigimos al Congreso la aprobación del PL 4786 para la creación de un régimen pensionario especial para el magisterio y de este modo tengamos una vejez digna.
No nos podemos olvidar de los soldados del magisterio. Exigimos aumento de bonos para docentes en zona rural, frontera y VRAEM, pago del bono de S/ 380, nombramiento anual hasta el 2030 y por supuesto, la continuidad de la política de aumentos progresivos para llegar a 1 UIT el 2026.
El Paro tiene que ser contundente. Solo la mayor unidad nos dará la fortaleza para vencer.
Hay que desterrar al divisionismo que solo siembra cizaña en el corazón del magisterio y mostrar determinación para luchar hasta las últimas consecuencias.
¡El SUTEP ya lo sabe, sin luchas no hay victorias!