La retroalimentación como un proceso continuo, no se restringe a momentos específicos, es un proceso continuo y permanente, necesario para el docente y habitual para el estudiante.
Debe generar sentimientos positivos respecto al aprendizaje y promover la motivación intrínseca.
Una retroalimentación es eficaz cuando el docente revisa el trabajo del estudiante, identifica, sus logros, progresos, sus errores recurrentes y los aspectos que más atención requieren.
Para ello es importante contar con criterios de evaluación claros y explícitos.
La retroalimentación para mejorar la enseñanza
Permite al docente prestar más atención a los procedimientos que emplea el estudiante para ejecutar sus actividades y elaborar sus producciones o actuaciones
Reajusta sus estrategias de enseñanza para responder a las necesidades identificadas en sus estudiantes.
Diseña nuevas significativas, ofreciendo andamiajes, apoyos y modela cuando es necesario para fortalecer el aprendizaje de sus estudiantes.
Replantea la manera de relacionarse y comunicarse con sus estudiantes, enfatizando en aspectos que cada uno de sus estudiantes necesita.
La mediación que brinda está orientada a acortar la brecha entre el nivel de logro actual del estudiante y el nivel esperado.