El fallecimiento del profesor Wolmer Mamani Chijcheapaza, de la institución educativa José Antonio Encinas, de la comunidad Antapallpa del distrito de Omacha (Paruro), que realizaba clases semipresenciales, causó tensión en el sector Educación de la región Cusco.
Ernesto Meza, dirigente del Sindicato Magisterial (Sima) responsabilizó al director del colegio de obligar al docente a la presencialidad pese a sus problemas de salud. Cabe precisar que, el motivo de la defunción del maestro fue una enfermedad ajena a la COVID-19.
Sin embargo, para el Sima, no existen condiciones para el retorno a las aulas en las zonas rurales. “Profesores, si ustedes quieren volver, háganlo, pero si no, no los pueden obligar. En el caso de los docentes contratados, ellos se sienten más indefensos”, manifestó Meza.
Ante las acusaciones, la Gerencia Regional de Educación anunció querellas; no obstante, detuvo la promoción de la semipresencialidad.
“Aún no tenemos un reporte oficial. Los directores de los colegios se sienten amedrentados con las denuncias que salieron y no han indicado dónde se retornó a las clases. Igual ya hemos procedido con las denuncias”, dijo Arturo Ferro, gerente regional de Educación.