Objetivo del plan lector 2022 en las Instituciones educativas de la educación básica
Establecer disposiciones para la organización e implementación del Plan Lector, el cual genera condiciones en la formación de la trayectoria lectora de las y los estudiantes en las Instituciones Educativas y programas educativos públicos y privados de la Educación Básica, y en el desarrollo de competencias comunicativas para el ejercicio de su ciudadanía y participación en la vida social.
El Plan Lector tiene por objetivo generar condiciones al desarrollo de la trayectoria lectora de todas las y los estudiantes de Instituciones Educativas y programas educativos de la Educación Básica de todo el país, con la finalidad de desarrollar sus competencias comunicativas en castellano y/o en lenguas indígenas u originarias (LO), para el ejercicio de su ciudadanía y su participación en la vida social.
De manera específica, a través de la implementación del Plan Lector, se buscan alcanzar los siguientes objetivos:
a) Promover experiencias de lectura donde las y los estudiantes con diferentes necesidades y en diversos contextos del país, lean por sí mismos o a través de la mediación del adulto, con diversos propósitos de lectura personales y colectivos, en variados escenarios (espacios convencionales como la biblioteca y el aula; y, no convencionales como el patio, el jardín, entre otros), así como en diversos momentos.
b) Promover el acceso y disponibilidad a los diversos tipos de textos de diferentes géneros, autores y temas, presentados en distintos formatos y soportes, para las y los estudiantes con diferentes características, necesidades y en diversos contextos del país, dotados por el MINEDU u otros, que forman parte de la biblioteca de aula o escolar, como una práctica instaurada en la IE,, con el propósito de que todos y todas las estudiantes puedan acercarse y hacer uso de ellos, dentro y fuera del horario de clases.
c) Generar diversas experiencias de lectura que aseguren el desarrollo de las competencias comunicativas de lectura, escritura y oralidad de las y los estudiantes de los diferentes niveles y modalidades de la Educación Básica, que puedan asegurar la profundización de la lectura y la vinculación de los lectores con los textos, considerando los diversos propósitos de lectura y
contextos.
d) Promover la creatividad, la imaginación, el pensamiento crítico y la autonomía del lector a través de diversas experiencias de lectura.
e) Fortalecer el desarrollo del comportamiento lector de las y los estudiantes, considerando sus prácticas de lectura y las diversas formas en que se acercan a la lectura, dentro y fuera de la escuela.
f) Fomentar el uso efectivo, sistemático, pertinente y creativo de la biblioteca de aula o escolar, con los textos, físicos y digitales, distribuidos y aprobados por el MINEDU u otros, así como de otros espacios no convencionales.
g) Incentivar la participación y compromiso de la comunidad educativa, las instituciones del Estado y de la Sociedad Civil, en el desarrollo de acciones a favor de la lectura en castellano y/o LO, encaminadas a conformar una comunidad de lectores.
DESARROLLO DEL PLAN LECTOR
La gestión del Plan Lector en las IE y programas educativos se desarrolla a lo largo de las siguientes etapas:
a) Etapa 1: Diagnóstico
b) Etapa 2: Diseño e implementación
c) Etapa 3: Monitoreo y evaluación
ETAPA 1: DIAGNÓSTICO
El diagnóstico del Plan Lector busca identificar las fortalezas y debilidades de la situación actual de la lectura en la IE o programa educativo, considerando las características que tienen los estudiantes en su práctica lectora. Se lleva a cabo mediante la recolección y análisis de la información relacionada con las prácticas de la lectura y los textos escritos, y escenarios lingüísticos en LO. Constituye el principal insumo para justificar la necesidad y diseño del Plan Lector, que responda a las necesidades y características de la comunidad y servicio educativo.
La comisión de Calidad Innovación y Aprendizaje, como responsable de liderar el ETIPL y la comisión de Gestión de Materiales y Recursos Educativos, quién preside el ETGME, o los que hagan sus veces en la IE o programa educativo, deben trabajar de manera conjunta para recolectar y analizar la información requerida como parte del diagnóstico.
Esta información sirve como insumo para elaborar el diagnóstico local (UGEL) y regional (DRE) sobre: i) el comportamiento lector de las y los estudiantes; ii) las prácticas de lectura y escritura de los docentes; iii) las prácticas de lectura, escritura y oralidad de la comunidad; que les permita implementar intervenciones pertinentes.
El diagnóstico del Plan Lector debe considerar como mínimo los siguientes aspectos:
Comportamiento lector de las y los estudiantes:
a. Para medir el comportamiento lector, se recogen los siguientes aspectos:
i. Tipo y frecuencia de lectura: frecuencia lectora de distintos tipos de textos escritos, preferencias de lectura, variación de la lectura con relación a años anteriores, y las prácticas lectoras en las y los estudiantes.
ii. Motivos para leer, razones por las que no se lee y las limitaciones que la lectora o el lector percibe sobre sí misma/o en torno a la lectura.
iii. Uso del tiempo libre: Distribución del tiempo libre de las personas entre la lectura y otras actividades.
iv. Acceso a la lectura: Medios a través de los cuales se accede a los diversos materiales de lectura.
b. Se elabora y aplica un cuestionario u otros instrumentos, teniendo en cuenta los aspectos definidos previamente, a fin de recoger la información del comportamiento lector de las y
los estudiantes de todos los niveles y modalidades, es decir de cómo construyen sus prácticas lectoras, a fin de que las acciones planificadas en el Plan Lector respondan a ellas y las
potencien. El cuestionario u otros instrumentos pueden ser adaptados a las características de las y los estudiantes. Para ello, se podrá tomar como referencia el cuestionario propuesto
en la Metodología común para explorar y medir el comportamiento lector de CERLALC1 , que podrá ser adaptado y contextualizado a nivel de IE, local y regional.
7.1.4.2. Las prácticas de lectura y escritura de las y los docentes Para recoger las prácticas de lectura y escritura se debe elaborar un cuestionario y una entrevista, dirigidos a las y los docentes, a fin de identificar las fortalezas y debilidades para plantear acciones de mejora (ver Anexos A y B). Así, a través del cuestionario (Anexo A), se busca conocer lo siguiente:
i. Cuánto leen los docentes: frecuencia de lectura mensual o anual.
ii. Qué leen y con qué propósito: tipos de textos, razones por las que se lee.
iii. Qué escriben y con qué propósito: tipos de textos, razones por las que se escribe.
iv. Cómo leen: modos (lectura individual, colectiva, lectura en casa, entre otras), formatos, soportes.
v. Cuánto tiempo leen: rango de tiempo destinado a la lectura al mes.
vi. Qué estrategias de lectura y escritura emplean.
vii. Si habitualmente tiene prácticas de lectura y escritura. Asimismo, la entrevista (Anexo B) tiene por finalidad recoger información complementaria para poder profundizar en las
prácticas de lectura y escritura de las y los docentes.
7.1.4.3. Las producciones orales y escritas de la comunidad a. Para realizar el recojo de información, se debe identificar las diversas producciones que la cultura ha generado a lo largo del
tiempo, con la finalidad de fomentar su recuperación por escrito y lograr su difusión, así como promover su registro audiovisual, tales como:
● Tradiciones
● Mitos
● Leyendas